Tariku Bekele gana la San Silvestre de Vallecas
«Asumí riesgos desde el principio», dijo el vencedor, ya abrigado tras una noche particularmente fría en la capital. Tariku Bekele, que completó los diez kilómetros en 28:29, mandó desde el inicio, en las primeras rampas de Concha Espina. Nadie pudo resistir su paso. Medalla de bronce en los 10.000 metros de los pasados Juegos de Londres y hermano menor de Kenenisa, doble campeón olímpico, el etíope dio muestras de su extraordinaria calidad. Ayad Lamdassen, el español de origen marroquí, trató en vano de seguir su estela. Un año después de vencer en Sao Paulo, Bekele dominó la carrera vallecana y se convirtió en el tercer hombre que se hace con las dos grandes San Silvestres mundiales, siguiendo los pasos del portugués Carlos Lopes (vencedor en 1979 y 1980) y el mexicano Arturo Barrios (1989). En la prueba femenina ganó la también etíope Gelete Burka.
La carrera tiene una parte deportiva, pero es también un lado festivo. La profesional es una de las primeras del mundo, pero la popular es, sin duda, la número uno. Este año un total de 39.000 personas, de las que 11.000 eran mujeres, disputaron la prueba. Los más afinados buscan mejorar sus marcas, pero son miles los que simplemente pretenden acabar al año de una manera inolvidable. Ayer, una vez más, utilizaron todo tipo de disfraces para despedir 2012. Se pudo ver a muchos con el atuendo de banqueros repartiendo caramelos y sobre todo muchas batas blancas, recordando la movilización que han protagonizado los médicos madrileños contra la privatización de seis hospitales y centros de salud.
Este año la carrera se vio también afectada por la huelga de Metro. Los sindicatos habían convocado paros desde las cinco de la tarde hasta las dos de la mañana. La Comunidad decretó unos servicios mínimos insuficientes para que las 40.000 personas que llegaron a Barajas volvieran a sus casas.
Para la Cabalgata de Reyes se decretó el 90% en la franja horaria del desfile, pero para ayer se prefirió que los corredores volvieran a casa andando porque los servicios de Metro resultaban escasos. El atasco de turismos en la zona, de Vallecas tras la carrera profesional y popular fue grandioso.
El Ayuntamiento de Madrid preparó un dispositivo para garantizar la seguridad, la movilidad y la limpieza durante la San Silvestre. Lo formaron 216 policías municipales, 19 sanitarios del Samur-Protección Civil y 91 operarios de limpieza.
Desde las 17.30 horas el centro de la ciudad y la subida hasta Vallecas estuvieron paralizados por la presencia de miles de corredores y espectadores que animaron a los deportistas que llegaron a Vallecas con una temperatura de tan sólo tres grados.
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