martes, 30 de octubre de 2012

Un árbitro llama a Mata ``español gilipollas´´



Juan Mata no escuchó uno de los supuestos insultos que han colocado al árbitro Mark Clattenburg en el punto de mira del fútbol inglés tras el polémico partido entre el Chelsea y el Manchester United. Una de la expresiones presuntamente utilizadas por el colegiado fue Spanish twat («español gilipollas»), y fue dirigida al jugador asturiano, pero la queja partió al parecer de otro miembro del club. En su denuncia, el Chelsea, acusó al árbitro Clattenburg de usar un «lenguaje inapropiado», al dirigirse a dos futbolistas en dos incidentes diferentes durante el encuentro. El otro jugador fue Obi Mikel, un nombre revelado por fuentes del club, y el supuesto insulto fue de contenido racista según recogieron ayer varios medios británicos. 


La Federación inglesa (FA) abrió ayer una investigación para aclarar lo ocurrido. Podría basarse en los testimonios de los jueces de línea y el cuarto árbitro, que pudieron escuchar a Clattenburg durante el encuentro a través de sus auriculares, pero el sonido no queda registrado en una grabación. Otra prueba pueden ser las imágenes de Sky Sports, la televisión que retransmitió el partido. 
En un comunicado emitido tras la denuncia del Chelsea, la asociación de árbitros profesionales afirmó que las acusaciones contra Clattenburg serán tratadas con «suma seriedad» y que el árbitro «cooperará completamente y da la bienvenida a la oportunidad de aclarar los hechos». Su nombre no apareció ayer en la lista de colegiados asignados en la próxima jornada de la Premier, lo que puede interpretarse como un castigo. 


Clattenburg no es ajeno a la polémica. Su nombre ha protagonizado otros incidentes con banquillos de la Premier y también un escándalo ajeno al fútbol, cuando fue suspendido durante varios meses por una deuda de 60.000 libras contraída en un negocio fallido. Fue el hombre que arbitró la final entre las selecciones de Brasil y México en los Juegos Olímpicos de Londres, el pasado verano. 

Los presuntos insultos no conforman el único incidente que marcó un partido que acabó con derrota del Chelsea tras las expulsiones de Ivanovic y Fernando Torres. Durante la celebración del gol de Chicharito, que dio la victoria al Manchester United, hubo monedas lanzadas desde la grada y un steward, personal encargado de seguridad, acabó desplomado en el césped tras lesionarse en la rodilla por un resbalón. La policía metropolitana de Londres confirmó ayer que abrirá una investigación sobre lo suceso.

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